"Las montañas por sí mismas no significan nada, son sólo piedras y hielo. Quien les da vida es el ser humano al subirlas y hablar de ellas; al vivirlas les da entidad. No podría decir que el montañismo en sí es un deporte, porque aquí no hay mejores o peores. Esto no son los juegos olímpicos donde uno es más rápido por tres segundos o porque ha saltado dos centímetros más. Aquí lo importante es que cada uno sea consciente de los límites de su cuerpo. Además, la fama que consigues con el deporte, para el alpinista no significa nada. Eso que llaman ‘gloria’ para el alpinista no existe. Esto no es fútbol o tenis. No da dinero. Por eso no vamos ahí arriba en busca de éxito, vamos porque es lo que nos da vida." Alexei Bolotov (1963-2013).
Descansa en paz allí donde tus sueños siempre te llevaron ... hasta siempre.
7 comentarios:
Se siente uno identificado... En palabras y en otras cosas.
Pero es inútil resistirse a ese canto de sirenas que es la montaña.
Saludos!
Tienes toda la razón Antonio ... un saludo.
Y este fotón?
Me tiene intrigado la luz de las montañas con el cielo tan estrellado.
Hola Iker, lo cierto es que a mi tb me intrigó la foto cuando la revelé puesto que es imposible que se vean tb las estrellas habiendo esa luz en las montañas ... no se la razón ... desde luego que potencié esas luces cálidas sobre las montañas en el revelado y contraste mucho el cielo ... pero no se trata de un montaje ... un abrazo
Que frase mas humilde de Alexei !!! dice mucho de esta persona. Gran foto ( aclarada la explicacion de Iker) para una triste perdida ( otra mas :-( ))).
Gracias Javier por traernos estas joyitas.
Muy bonita la foto y la dedicatoria Javier!
Hace 15 días yo también he perdido dos compañeros alpinistas en mi tierra, en nuestro Pirineo, cuesta entender esta fuerza de atracción que tiene la montaña sobre nosotros, yo creo que lo necesitamos para sentirnos vivos igual que el aire que respiramos. La Naturaleza lo es todo y nos lo quita todo...
Un abrazo,
Fran
Este además era uno de los "nuestros" Chavi. Yo jamás he sentido esa llamada de las montañas pero siento cada uno de vuestros éxitos, lo mismo que las pérdidas, como si fuesen míos. Y, casualidades de la vida, justo el día del aniversario de Iñaki.
Saludos.
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