El destino quiso, afortunadamente, ( por cuatro ocasiones ), que no pudiera ir este año de expedición a intentar subir el Manaslu, así que hubo que cambiar los planes a prisa y corriendo, y buscar una alternativa ... las luces del Kanchenjunga, la tercera montaña más alta del planeta, de 8586 metros.
Sin duda la cara norte de esta montaña es una de las más sobrecogedoras del planeta. De los cuatro días que estuvimos en su campo base solo tuvimos un amanecer medianamente decente, el resto nieblas y juramentos.
La experiencia fue muy bonita a pesar de la dureza de la aproximación y de la vuelta.
Por aquí os dejo un pequeño avance.
APROXIMACIÓN AL CAMPO I DE LA CARA NORTE DEL KANCHENJUNGA
SIN DUDA UNA DE LAS MÁS SOBRECOGEDORAS Y BELLAS VISTAS DE LOS HIMALAYAS
AMANECER DESDE EL CAMPO BASE DE LA MONTAÑA
UNA FRÍA NOCHE DE LUNA LLENA EN EL CAMPO BASE DE LA CARA NORTE DEL KANCHENJUNGA